El agua es vida y si se dan las condiciones se desarrollan no solo microorganismos
patógenos. También cuando se dan las condiciones crecen otro tipo de microorganismos como las algas.
Este tipo de microorganismos requieren de luz agua y bióxido de carbono para crecer y desarrollarse.
Si no se clora adecuadamente y se deja ensuciar el agua, las algas crecerán no solo en ésta, sino que se adhieren a la superficie de la piscina y es sumamente difícil remover estas una vez que han crecido y se han desarrollado.
Cuando se dan estas condiciones, es posible limpiar las algas con un cepillo y manteniendo condiciones de buena cloración en el agua, pero lo más conveniente es evitar su crecimiento para la cual no deberá descuidarse la dosificación de cloro y periódicamente se deberá agregar algún algicída. Los algicídas son compuestos químicos, generalmente derivados de aminas cuaternarias y desde luego deberán ser inocuos para los seres humanos que son usuarios de las piscinas.